EDAD
¿Qué se puede hacer en ochenta años? Probablemente empezar a darse cuenta de cómo habría que vivir y cuáles son las tres o cuatro cosas que valen la pena.
Un programa honesto requiere ochocientos años.
Los primeros cien serían dedicados a los juegos propios de la edad, dirigidos, por ayos de quinientos años, a los cuatrocientos años, terminada la educación superior, se podría hacer algo de provecho; el casamiento no debería hacerse antes de los quinientos; los últimos cien años de la vida podrían dedicarse a la sabiduría.
Y al cabo de los ochocientos años quizá se empezase a saber cómo habría que vivir y cuáles son las tres o cuatro cosas que valen la pena.
Un programa honesto requiere ocho mil años.
Etcétera
COMENTARIOS
Este texto producto de la profundidad del pensamiento de Sábato me ha llamado la atención, primero porque hay una muestra de comicidad poco común en sus textos, pero por sobre todo encuentro en ella el mensaje de la levedad indiscutible de la condición humana , esa soberbia de “creer “ que podemos llegar a saber mucho o todo.. , de que concienciamos la esencia misma de nuestro ser cuando estamos por marcharnos , finalmente la vida misma es un continuo e interminable proceso de aprendizaje , todo lo que aprendamos nunca será suficiente , nuestro aporte por magnánimo que parezca no es más un grano de arena .
Sin lugar a dudas es una profunda reflexión de Ernesto Sabato. Parte de ella lo dice en sus textos y pinturas. Pienso que el ser humano es una criatura muy limitada, he leído que sólo tenemos desarrollado un 10% del cerebro.El misterio del Universo y la involución del ser humano. Digo: ¿Volveremos a ser andróginos como lo fuimos en nuestro origen?
ResponderEliminarUn abrazo, Pablo.
Me llama la atención el acento irónico que deja mas que clara la debilidad del ser humano.
ResponderEliminarYo, añadiría que si a los cuatrocientos años se deja de aprender, es a partir de ese momento en que se empieza a desaprender lo aprendido erróneamente o lo negativo. Y esta conducta de desaprender, dura mas de ocho mil años.
Siempre un placer leerte, compartir y aprender de tus aportes.
Muchos besos,Pablo
Bonitas palabras de Ernesto Sabato las que nos has traido, me alegró leerlas, me recordaron lo pequeña que soy ante tanta inmensidad. Lo mucho que me queda por conocer, yo diría casi todo.
ResponderEliminarGracias por esta buena dosis de humildad, ne vendra muy bien.
Un abrazo.
Me gustaría, para empezar, llegar a esos 80 años…
ResponderEliminarUn placer leerte.
Saludos.
Gracias >Elsy por tu comentario .
ResponderEliminarSi Duna siempre somos nada y todo a la vez.
ResponderEliminarGracias a ti querida Mercedes.
ResponderEliminarSalvador , que bueno tenerte por esta casa , espero verte frecuentemente y te iré a visitar pronto.
ResponderEliminarPablo