LATINOAMERICANOS

Un día como tantos, salí a caminar por las calles de la ciudad fronteriza de Ipiales-Colombia en el estado de Nariño, y me preguntaba por qué hay un camino tan espinoso hacia el progreso, pues muy al margen de las condiciones macroeconómicas y de la sabida baja en los precios del petróleo y el efecto que esto ha causado en las pequeñas economías latinoamericanas más el peso incontrastable de la pandemia, pensaba que pese a todas las limitaciones y al estar de paso por esta pintoresca ciudad de la frontera colombo-ecuatoriana, tomé consciencia de que es la tierra del icono del Boom Latinoamericano, Gabriel García Márquez el mismo que pudo ciertamente influir en la literatura así como en la cultura de occidente y del mundo, con su ya afamado Realismo Mágico, siendo así y googleando un poco repasé el libro de Carlos Alberto Montaner “Los latinoamericanos y la cultura occidental” 

En este maravilloso texto se redacta en parte, como la edificación de la vieja Europa, compuesta de raíces grecolatinas, árabes y de otras latitudes permitieron llegar finalmente a un mestizaje y fusión de culturas, lo cual fue posible mediante la épica aventura sostenida por los Reyes Católicos, ejecutada en su momento por el gran Almirante de la Mar Océano,  Cristóbal Colón.

(Monumento a Colón) Nacimiento de un hombre nuevo, Sevilla-España

Debo decir que el libro de Montaner es un verdadero deleite para quienes logren disfrutar con un ensayo histórico bien documentado, pues permite entender la génesis de las costumbres, creencias y tradiciones latinas en América del Sur y finalmente "por qué somos como somos los latinoamericanos. 

__________________________________________________________________________

      "En la Biblia, el libro sagrado, estaba la verdad revelada, pero los indios no sabían lo que era un libro y no podían entender que ese objeto débil y pequeño encerrara la palabra de Dios"

     "Cuando Pizarro trató de explicarle este extraño fenómeno a Atahualpa, el Inca, incrédulo, colocó la Biblia junto a su oído, no oyó la palabra de Dios, tiró el libro al suelo y llegó a la conclusión de que aquel maloliente personaje con la cara cubierta de pelos era un farsante"

_________________________________________________________________________________

Entiendo que los pueblos de las culturas precolombinas aprendieron a soñar más allá de lo imaginable, pero siempre atados a la realidad y hermanados a su legítima cosmovisión, el latinoamericano es un ser soñador per sé, y lo es pese a sus precariedades, por eso se hace mágico el instante de recorrer callejuelas tristes, donde se escucha el eco esperanzador de los niños jugando descalzos, donde se tararea una canción para festejar la vida, y que una tarde huela a lluvia fresca de abril.

Para concluir quiero expresar mi deseo sincero de que estos mismos momentos el pueblo colombiano pueda llegar a la solución pacífica de sus acuciantes problemas sociales, marcado por ahora con una oscura huella de violencia.