Bien, este no es el texto de Robert Wasler .. en realidad no, creo que ya habrá un momento para hablar de aquello, hoy ha sido un día algo extraño, pasé en la mañana casi sollozando al ver al pueblo venezolano renaciendo a la esperanza de días mejores lo cual me da cierta paz, ahí me enteré por las bondades de la internet de este libro Bolivar y Francisquita a propósito de la carta al filo del sepulcro que el Libertador escribió a su prima Fanny du Villars.
Pensaba absurdamente que Manuela Sáenz fue su gran amor, en fin .. ,y luego me he puesto a revisar un poco de Borges y María Kodama, me ha fascinado escucharla, bueno en verdad es un acto de amor infinito esa relación de estos dos personajes de la literatura respetando la distancia de Borges como escritor universal que dentro de su erudición también trasluce una sencillez propia de su genialidad y con María Kodama igual, pensé tambien en Saramago con Pilar del Río, me parecía verlos..
Me asombró por sobre todo su encuentro tan espontáneo, considerando los 16 años de ella y Borges ya invidente muchísimo mayor que ella , nunca se separaron luego de conocerse, ella de padre japonés, manifestó su asombro por la Victoria de la Samotracia que está en el Louvre en París , cuando tuve la oportunidad de verla , no la ví por clara ignorancia ante el arte clásico helenístico pero hoy que la nombró Kodama me he detenido a verla (la escultura) y es una obra sobre la que no tengo palabras para describirla más aún considerando que fue hecha en el siglo V A.C , esa ilusión que se crea del vestido mojado en el vientre de la mujer..
Finalmente me quedé pensando en Gota de Cristal y le dije esto:
No sé donde está, ni que hace sin embargo,
desearía que jamás dejemos de hablar aún corriendo el riesgo de que nos amemos eternamente,
pero no importa..,
quisiera que nunca nos dejemos de hablar..
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